CAMBIOS SOCIALES EN ECUADOR

 

Hasta bien entrada la mitad del siglo XX el Ecuador tenía como economía primaria la agricultura, muy poca infraestructura industrial, escasa innovación tecnológica, concentración de la propiedad y explotación de la mano de obra en precario. Los latifundistas, la banca y las grandes corporaciones nacionales eran la clase dominante en el país. Mas de la mitad de la población se dedicaba a la agricultura o la pesca y la otra mitad estaba compuesta por pequeños comerciantes y artesanos, la mano de obra de la industria era poca y no cualificada además el sector servicios era apenas inexistente.

Existían otra serie de carencias con respecto a la implementación de las políticas públicas, como ejemplo tres cuartas partes de la población carecía de agua potable, electricidad o servicios higiénicos por falta de infraestructura en colectores de aguas hervidas y el analfabetismo llegaba más de un treinta por ciento de la población en edad escolar. La situación parece haber mejorado y la sociedad ha evolucionado con la aparición de nuevos actores sociales.

A partir de la década de los 70 los grandes latifundios se modernizan, la industria crece al igual que el sector de la construcción y el comercio se fortalece debido a las importaciones. La nueva burguesía adjunto nuevos sectores punteros en economía y empieza a invertir en el país con capital extranjero. Surgen oligopolios que controlan la producción nacional y el sector agroindustrial

Las cámaras de comercio se fortalecieron como bastión de los empresarios que reclamaban al gobierno más prebendas y menos injerencia en la economía. Ante esta bonaza económica los sectores medios se vieron fortalecidos, pero en un corto espacio de tiempo se vieron afectaos nuevamente por la recesión económica, la crisis financiera y las políticas neoliberales.

A partir de la segunda mitad del siglo XX el país vive tiempos convulsos, la clase obrera crece de forma exponencial, las asociaciones de estudiantes empiezan a movilizarse al igual que los campesinos y los pueblos y nacionalidades que sienten son los grandes olvidados . El desarrollo del capitalismo en el Ecuador no fue igualitario lo que generó grandes diferencias en distintos sectores, la reforma agraria no pudo solucionar los problemas de fondo con respecto a la propiedad de la tierra y el crecimiento industrial subió en mano de obra, pero no lo suficiente como para cubrir la demanda del sector.

Los extrarradios y barrios periféricos están llenos de vendedores informales ,lo que hace que en el país haya una economía en B no declarada que a su vez perjudica el crecimiento del PIB. La mayoría de los trabajadores (80% de los más pobres) estaban desorganizados debido a la heterogeneidad de las sociedades ecuatorianas. A partir de los años 70 s organizan y se integran los centros de trabajo con el Sindicato de Trabajadores Ecuatorianos (CTE).

En esos tiempos convulsos distintas asociaciones de trabajadores como la Central Ecuatoriana de organizaciones Clasistas (CEDOC) y la Confederación Ecuatoriana de Organizaciones Sindicales Libres (CEOSL) se unen para fundar el Frente Unitario de los Trabajadores (FUT) que sería la cara del proletariado en las luchas obreras, estas asociaciones de trabajadores perdieron fuerza en los años ochenta, pero resurgieron nuevamente a principios del siglo XXI.

La reforma agraria también conto un sindicato que se puso al frente de sus protestas la FENOCIN (Federación Nacional de Organizaciones Campesinas ,Indígenas y Negras) que proyecto la interculturalidad de los distintos pueblos y etnias del Ecuador bajo una federación en lucha por sus derechos. Otros movimientos sociales y algunos de tinte religioso se generan por todo el país, en la zona andina se crea el Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicos del Ecuador, pero sería en 1986 cuando se crea la ( CONAIE) Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador. Tendrán que pasar vestidos años más para que los pueblos y nacionalidades el Ecuador fueran reconocidos en la Constitución .

El movimiento indígena cayo como un revulsivo e hizo que otros sectores de la sociedad también se pusieran en pie ,los pequeños comerciantes se organizaron activamente al igual que los estudiantes ,las asociaciones de mujeres dan un paso al frente y las organizaciones ecológicas claman por políticas públicas que guarden el patrimonio natural.

El progreso y la modernidad va cambiando sin darse cuenta a la barroca sociedad ecuatoriana. Se producen cambios en la forma tradicional de vestir, incluso en los hábitos alimenticios con la llegada al país de las grandes cadenas de comida rápida. Todos estos cambios socio culturales y económicos son producto de la globalización, si bien es cierto que esta trajo aperturismo económico y cultural también generó un cierto desarraigo por parte de los nacionales que olvidando lo propio con el anhelo de ver su reflejo en el espejo del exterior.

En la década de los años ochenta la televisión llega por fin a casi todo el país y en los albores del siglo XXI los teléfonos móviles ,internet y las herramientas digitales están presentes en casi todo el territorio nacional. Desgraciadamente aún hay muchos sectores donde no existe infraestructura de este tipo, pero teniendo en cuenta que hoy en día internet es un servicio básico más, habría que plantear a los gobiernos el subsidio e implantación de estos equipos que a fin de cuentas son una herramienta mas para el desarrollo nacional a todos los niveles.

La preocupación estatal por el alto índice de analfabetismo lleva a este a incrementar los centros educativos y a la integración de población indígena que hasta entonces había estado relegada, es la líder indígena Dolores Cacuango quien gracias a la lucha social consigue que se cree el Sistema Nacional de Educación Intercultural Bilingüe. Hoy en día las mujeres están presentes en todos los ámbitos de la sociedad, muchas se han independizado económicamente y son profesionales que trabajan en distintos ámbitos para la mejora del país encontrando espacios en el desarrollo de la sociedad y la cultura.

No es fácil y queda por hacer pues los cabios sociales no se dan de un día para otro y están supeditados a la economía y a la política, pero no es menos cierto el gran potencial de la sociedad ecuatoriana, en capacidad de lucha y de reinventarse adaptándose a los nuevos tiempos para dejar de ser un país en vías de desarrollo y convertirse una de las potencias económicas de la región.